Linterna Verde al divan

26 de agosto de 2011

A pesar que el 582 se detuvo en cada semáforo existente de camino al Shopping de Punta Carretas, llegamos a tiempo para ver Linterna Verde.

Como sabrá mas de un adicto a los cómics, (yo mas del Pato Donald no pase), supe allí mismo que este superhéroe pertenece al Cuerpo de Linterna Verde, una especie de policía intergaláctica encargada de mantener el orden en el universo y regida por unos seres inmortales llamados guardianes.

El poder de estos Linternas Verdes, reside en su anillo que, a su vez se alimenta de la energía de la voluntad de todos los seres vivos del universo, al menos así lo entendí. Este le da la facultad a su portador de hacer realidad todos sus pensamientos, lo que requiere cierta disciplina y poder de voluntad, valga la redundancia.

El protagonista, Hal Jordan, es un irresponsable e inmaduro piloto de pruebas que lo único que realmente le sale bien y hasta por ahí nomás, es su trabajo. Pero pronto por causas cósmicas todo cambiara y deberá ponerse las pilas para salvar todo lo que mas quiere.

Digamos que es la formula de siempre, el joven “rebelde sin causa”, deberá abandonar su postura adolescente ante la vida y asumir las responsabilidades que conlleva su nueva realidad, en otras palabras hacerse hombre.

Agreguemos también que se puede desprender la siguiente enseñanza, que para hacer realidad nuestros sueños, se requiere, voluntad, disciplina, y no tener miedo ante las dificultades. Me salió el Freud de adentro, valor, no puedo con mi condición. Pero mas allá de eso, es un buen filme, entretiene, no te aburrís, ideal para verlo con tus hijos en el calor de tu hogar en uno de estos fríos fin de semana.